Proponen incrementar en un punto la cotización en salud

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Proponen incrementar en un punto la cotización en salud

Esto con el fin de financiar un faltante de 12,1 billones de pesos que se requieren para lograr cobertura total en salud.

El Gobierno requiere 12,1 billones de pesos para lograr la cobertura total en salud (meta que se ha impuesto de cara al 2010), y para ello está proponiendo aumentar en un punto la cotización que hacen los trabajadores asalariados colombianos al Régimen Contributivo en Salud.

Hoy el aporte para salud es del 12 por ciento, de los cuales las empresas aportan el 8 por ciento y los empleados el 4 por ciento. También afilia a independientes o pensionados con capacidad de pago.

La idea que planteó ayer el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, es subir un punto la cotización en salud, aportabdo en igual proporción trabajadores y empleadores. Esos recursos adicionales irían al Fondo de Solidaridad y Garantías (Fosyga) para mejorar la cobertura en salud.

Ello implica incluir en el régimen a cerca de 5 millones de personas pobres que hoy no están cubiertas.

El tema iría incluido en el proyecto de acto legislativo que prepara el Gobierno para lograr que después del 2008 los recursos que la Nación transfiere a las regiones mantengan la metodología que tienen hoy, es decir que crezcan de acuerdo con la inflación causada más 2,5 por ciento.

“Conozco desde luego la implicación que tiene en términos del costo de la nómina y habría que pensar en cómo compensarlo, pero en mi sentir es absolutamente indispensable encontrar recursos nuevos para financiar el faltante que tenemos si queremos cumplir la meta”, señaló el Ministro.

Pero los cuestionamientos no se hicieron esperar. El ex ministro de Hacienda, Juan Camilo Restrepo, señaló que es una propuesta muy gravosa para los trabajadores actuales que se sumaría a la lluvia de impuestos que se avecinan si se aprueba la reforma tributaria que radicó el Ejecutivo en el Congreso.

Seguir subiendo estas contribuciones que pagan los trabajadores es encarecer la generación de empleo en Colombia. Todos los diagnósticos dicen que mientras más se suben estas contribuciones parafiscales, menos empleo estable y productivo se crea en el país”, puntualizó Restrepo.

El asunto es claro. Para aumentar la cobertura en salud, el Gobierno requiere recursos y está en la disyuntiva de presentar una reforma tributaria de carácter neutro fiscalmente, es decir, por ese lado no habría cómo financiarlo.

La verdad es que los costos sociales del menor gasto en transferencias territoriales ha sido alto.

Según cálculos de la Contraloría los recursos dejados de percibir en salud por efecto del actual régimen de Transferencias asciende a 2,5 billones de pesos, lo que ha llevado a una cobertura bruta real a 2005 del 74 por ciento.

El Gobierno ha logrado importantes ahorros fiscales gracias al actual régimen de Transferencias territoriales. Sin embargo, en la otra cara de la moneda están los costos sociales de este menor gasto.

Según la Contraloría, en salud, “aunque las transferencias de la Nación representan recursos muy importantes para la ejecución de la política de salud en los entes territoriales, la salud pública se ha visto deteriorada y hasta ahora empieza a alcanzar los niveles de los noventa”.

Transferencias complican el panorama

El panorama para el Gobierno en materia de reformas estará complicado.

Por donde se le mire la reforma a las Transferencias se anticipa dura. En el Congreso, algunos parlamentarios señalan que o la reforma tributaria o a las transferencias, pero no las dos al tiempo. Otros piden un Estatuto Tributario Territorial.

El asunto es que si el Gobierno tiene un faltante de recursos para lograr alcanzar las metas de cobertura en educación y en salud, no puede pretender una reforma tributaria que no le reporte mayores recursos. También señalan que por el lado de las regiones hay espacio en materia de impuestos para obtener más dinero.

El Gobierno quiere sostener la fórmula actual de Transferencias, que crezcan con la inflación causada más 2,5 por ciento y algunas regiones no quieren reformar la ley para que las transferencias vuelvan a quedar atadas al comportamiento de los ingresos corrientes de la Nación.