El gobierno desistiría del IVA a la canasta familiar
Esa posibilidad fue abierta por el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, para salvar el proyecto de Reforma Tributaria que en ese punto en particular, ha sido blanco de fuertes críticas por parte de todos los sectores parlamentarios, incluyendo de la bancada uribista.
El ministro dijo que el gobierno respetará la voluntad y decisión que tomen las comisiones económicas del Congreso pero advirtió que en compensación, se tendrían que ajustar otros impuestos.
"Si es necesario modificar la estructura de lo que nosotros pretendemos, que me parece razonable y sensato por la parte social, pues tocará modificarlo y ver qué otro recurso hay que elevar", señaló el funcionario.
Según el Ministerio de Hacienda, el IVA del diez por ciento que propuso el gobierno para la mayor parte de bienes y servicios de la canasta familiar tiene un costo fiscal equivalente a un punto del Producto Interno Bruto, un poco más de tres billones de pesos.
El ministro Carrasquilla, dijo que la ampliación de la base para el cobro del Impuesto al Valor Agregado (IVA), es pilar fundamental de la reforma por lo que necesariamente se tendría que buscar un mecanismo sustitutivo de los ingresos que el fisco dejaría de percibir por esa vía, sin sacrificar las ganancias que en materia de competitividad ganaría el país con la propuesta que ha hecho el gobierno en materia de renta.
" Como tocaría afectar otros impuestos, toca ver cuál es el que menos perjudica. Este, el del IVA, que es completamente razonable a mi juicio, no es voluntad de Congreso discutirlo ni siquiera", apuntó el ministro Carrasquilla.
Insistió que bajo ningún punto de vista el gobierno aceptaría una reducción en el monto de los recaudos tributarios y por tendrían que ajustar otros gravámenes como la propia renta, que le quitaría competitividad al país o el cuatro por mil u otros impuestos que están en proceso de depuración.
"No he estudiado en detalle la propuesta de las bancadas pero el gobierno obviamente no es el que decide ni tiene la última palabra sobre cuál es la canasta que va a ser gravada o no. Si fuera por el gobierno nosotros ya habríamos tomado esa decisión. Esto es una democracia y la voluntad de las diferentes bancadas son las que tiene que respetar el gobierno y adaptar la propuesta que inicialmente llevamos a la voluntad de esas bancadas", puntualizó el ministro Carrasquilla.